Proyecto educativo

El mundo del niño/a, como el del adulto, está lleno de afectos, de acciones y de pensamientos, por tanto, en la escuela infantil, nuestra intervención educativa se basa en potenciar:

  • EL DESARROLLO AFECTIVO: para que un niño/a pueda desarrollar todas sus potencialidades es necesario que se sienta seguro, querido y respetado. Por ello, le damos tanta importancia al vínculo afectivo que el niño/a establece con la persona de referencia, la tutora del aula. Nuestra intervención se basa en responder a las necesidades de cada niño/a respetando el ritmo evolutivo de cada uno.
  • EL DESARROLLO MOTOR: sentirse seguro permite al niño/a aventurarse a conocer el mundo y a relacionarse con los demás, a experimentar. En estas edades esto se va a hacer a través del movimiento, de la acción. El juego, la experimentación y en el movimiento son la base de nuestro trabajo.
  • EL DESARROLLO COGNITIVO: todas estas exploraciones sirven para potenciar el desarrollo cognitivo del niño/a. Inteligencia es resolver problemas cotidianos, saber relacionarse con los demás y con uno mismo, crear, conocer y entender el mundo que nos rodea.

Todo esto se estructura y se desarrolla a través de:

  • Una METODOLOGÍA ACTIVA, que convierte al niño/a en protagonista de su propio aprendizaje, basada en el respeto al niño/a y a su individualidad.
  • Una METODOLOGÍA LÚDICA, basada en el JUEGO y en las RUTINAS, tan importantes para el niño/a en esta etapa, relacionadas con la alimentación, la higiene y el descanso, que son la base del desarrollo emocional y el aprendizaje en la primera infancia.
  • En nuestro día a día, nos gusta utilizar otras metodologías alternativas, resaltando sobre todo el método de Maria Montessori a través de actividades de experimentación.